Cinco mujeres blancas ancianas rodearon a una joven morena para protegerla con una barricada humana, mientras salía de la Primera Iglesia Metodista Unida en Charlottesville, VA, la cual ofreció un espacio seguro en un día tumultuoso cuando las tensiones estallaron alrededor de una manifestación de supremacía blanca, dejando tres muertos y decenas de heridos.
"Aunque la manifestación supremacista fue horrible y aterradora, lo que más recordaré durante el resto de mi vida es que mucha gente buena se unió. Ellos/as se unieron para proveer seguridad a los/as más vulnerables entre nosotros/as", dijo el Rev. Phil Woodson, pastor asociado de la Primera Iglesia Metodista Unida.
La iglesia ya estaba cerrada y en alerta incluso antes de que un automóvil golpeara a una multitud de manifestantes que estaban allí para contrarrestar la marcha del 12 de agosto, de nacionalistas blancos que luchaban por el traslado de una estatua confederada.
James Alex Fields Jr. fue acusado posteriormente de asesinato en segundo grado y otros cargos, en el accidente de coche que mató a Heather Heyer, de 32 años, e hirió a docenas de otros. Algunos de los heridos, así como las personas emocionalmente traumatizadas por la violencia, fueron llevados/as a la iglesia por equipos médicos que fueron establecidos allí, por el clero y por otros que salieron a ayudar, dijo Woodson.
"Fue una zona de guerra y nuestra iglesia estaba en el centro", dijo Woodson. Agregó que los/as voluntarios/as voltearon las mesas y, literalmente, crearon una zona de seguridad alrededor de la iglesia, cerrando las puertas para dejar una sola entrada. Las personas que entraban en la iglesia fueron escaneadas con detectores de metales de 20 dólares y no se permitió la entrada a nadie que estuviera armado.
Unas pocas horas después de que Heyer fue asesinada, el Teniente de Policía del Estado de Virginia, H. Jay Cullen, y el Piloto Policial Berke M. M. Bates murieron cuando su helicóptero se estrelló. Ellos estaban ayudando a los agentes que intentaban implementar orden en la manifestación de nacionalistas blancos en Charlottesville, dijo la policía.
El clero metodista unido ha sido uno de los líderes de los esfuerzos para contrarrestar las protestas del Ku Klux Klan y otros nacionalistas blancos en Charlottesville.
La Obispa Sharma D. Lewis, que lidera la Conferencia de Virginia, pidió a los/as metodistas unidos/as que "testifiquen a otros lo que la oración puede hacer en tiempos de temor y odio”. "Charlottesville es una ciudad herida de muchas maneras, por lo que oramos por la restauración de la calma, el orden civil para la comunidad y su gente, hoy y en los próximos días", dijo en un comunicado.
La Primera Iglesia Metodista Unida ha servido de punto de partida para las marchas de protesta y ha sido espacio seguro para las marchas anteriores, incluyendo una protesta en contra de una manifestación Ku Klux Klan en julio. El rally nacionalista blanco del 12 de agosto se cree que es el encuentro más grande en una década e incluyó “skinheads” y neonazis, así como miembros del KKK.
Connor Kenaston, un ex compañero de Misiones Globales que ahora es un estudiante graduado en la Universidad de Virginia, dijo que estaba sorprendido de cuántos de los nacionalistas blancos eran hombres jóvenes en sus 20s y 30s. "Fue aterrador verlos", dijo.
Su prometida, María Niechwiadowicz, quien trabaja con un programa de extensión nutricional en una iglesia episcopal local y también es una ex miembro de Misiones Globales, estuvo de acuerdo. Ambos vieron a hombres jóvenes cargando ametralladoras y rifles.
La pareja asistió a un culto interreligioso el 11 de agosto en la Iglesia Episcopal de San Pablo, y luego participó en una marcha del clero a la mañana siguiente con varios cientos de manifestantes anti-racismo.
"El culto interreligioso fue un lugar en el que vimos a Dios trabajando", dijo Niechwiadowicz. No pudieron salir después del servicio porque los nacionalistas blancos que habían celebrado una manifestación en la rotonda de la Universidad de Virginia se demoraron en la zona, creando problemas de seguridad.
Metodistas unidos/as de todo el mundo se unieron a más de 100 vigilias el 13 de agosto para recordar a Heyer.
A pesar del caos, muchos/as encontraron causa de esperanza como individuos/as e iglesias organizadas para oponerse al nacionalismo blanco.
"Tenemos que participar en lugar de hablar", dijo el Rev. Alvin Horton, pastor de la Primera Iglesia Metodista Unida. "Está en nuestro ADN como metodistas unidos/as para estar preocupados/as. El clero puede estar dividido en algunos temas, pero no está dividido en cuanto al racismo".
El Colectivo de Clérigos de Charlottesville, que está entre las organizaciones más significativas que se oponen a los esfuerzos de la supremacía blanca, incluye cinco clérigos metodistas unidos de cuatro iglesias.
Los manifestantes de 14 estados que se unieron a las protestas contra el racismo el 12 de agosto incluyeron muchos/as metodistas unidos/as.
"Es crucial que como metodistas unidos/as, enfrentemos este mal", dijo el Rev. John D. Copenhaver, pastor jubilado de la Iglesia Metodista Unida del Calvario en Salem, VA. Viajó 140 millas desde su casa en Winchester, VA para unirse al servicio de adoración y las protestas contra el racismo en Charlottesville.
"Lo hacemos individualmente y lo hacemos como iglesia. Vemos ese activismo en la carta que la Obispa Sharma Lewis nos envió para animarnos a participar en la contra-manifestación".
El Rabino Tom Gutherz de la Congregación de Charlottesville Beth Israel dijo que el principal propósito de la cooperativa del clero es la comunidad.
"El clero y los laicos están muy interesados en reunirse. Esto proporciona una manera de hacerlo y se filtra a través de nuestras congregaciones." dijo
Charlottesville, la casa de la Universidad de Virginia, es vista como un bastión liberal dentro del estado. Su estatua del general confederado Roberto E. Lee se convirtió en un punto focal cuando el consejo de la ciudad de Charlottesville votó el 6 de febrero de 2017, para moverlo del parque más prominente de la ciudad. En marzo, los opositores al retiro de la estatua demandaron, y la estatua permanece en el lugar mientras el caso continúa en la corte.
Como el Rev. Jan Rivero, pastor de la Iglesia Metodista Unida Wesley Memorial y miembro del clero colectivo, escribió en Facebook: "Habrá más de esto... simplemente tenemos que seguir siendo visibles. No lo podemos hacer solos".
Los servicios matutinos de la Primera Iglesia Metodista Unida fueron cancelados el 13 de agosto debido a que muchas calles aún estaban con barricadas, y todavía había grupos de manifestantes vagando por los alrededores. Sin embargo, la iglesia planeaba mantener un servicio a las 4 p.m.
Woodson planeaba hablar de dónde estaba Dios en los acontecimientos del 12 de agosto. "Dios es bueno. Ese día en que los nazis y los supremacistas blancos llegaron a nuestra ciudad con sus armas, coches, bates y spray de pimienta, la obra del pueblo de Dios también fue buena porque mucha gente pidió que se hiciera la voluntad de Dios, y luego ellos salieron y la hicieron", era parte de lo que diría Woodson en su sermón.
Dijo que a pesar de las "olas amenazantes" cientos de personas salieron a ayudar a innumerables víctimas, demostrando su dependencia del poder y la palabra de Cristo.
Lord es un reportero gráfico con sede en Nueva York, NY e Ivy, VA. Vicki Brown, editora del Methodist News Service, contribuyó con esta historia.
Comuníquese con Brown al 615-742-5470 o [email protected].
Para leer la noticia original en inglés, visite el enlace: http://www.umc.org/news-and-media/church-shelters-protesters-amid-deadly-turmoil
**Michelle Maldonado es la Directora Asociada de Comunicaciones Hispano/Latinas de la IMU. Puede contactarle al (615) 742-5775 o por [email protected].