Kathy L. Gilbert*
28 de junio, 2012 | Informe UMNS
Los metodistas unidos que trabajan abogando para que se lleve a cabo una reforma completa al sistema de inmigración creen que el veredicto de la Corte Suprema sobre la ley SB 1070, de Arizona, es un progreso, pero también se sienten decepcionados porque la corte dejó intacta la parte que permite discriminar en base al "perfil racial" de la gente.
El fallo desmanteló la mayor parte de la ley, pero dejó intacta la provisión que permite que la policía compruebe el estatus migratorio de cualquier persona detenida, si existe "la sospecha razonable" de que la persona podría estar en el país ilegalmente en base a su fisonomía (racial profiling).
"Aunque desilusiona que la Corte Suprema de los Estados Unidos haya mantenido el llamado 'racial profiling' de la policía de Arizona en contra de sus residentes, es significativo que haya eliminado el resto de la desacertada legislación", dice Bill Mefford, de Iglesia y Sociedad. "La reforma de la inmigración debe ser realizada por el gobierno federal&ellipsis; La reforma puede y debe llevarse a cabo este año, la cual deberá ser justa y compasiva".
El fallo "estuvo correcto en algunos aspectos", dice el Rdo. John L. McCullough, pastor metodista unido y director de Church World Service, organización afiliada. La idea del perfil racial "quedó intacta, lo cual prolonga los abusos civiles y humanos en Arizona".
El Rdo. Jim Perdue, misionero que trabaja en asuntos de inmigración en la Conferencia Desierto Suroeste, dijo que mientras que varios grupos afirman que el veredicto es un paso atrás, él prefiere ser más cauto. "Los jueces argumentaron que la sección 2 de por sí no ataca los derechos individuales o la soberanía del gobierno federal, pero podría hacerlo", dijo. "Todo depende de cómo se aplique la ley".
"La opinión de la corte se esforzó por mostrar las formas en que la ley hace daño, lo que es una advertencia a la policía de Arizona y otros estados de que serán vigilados respecto a violaciones de derechos específicos", añadió.
Julius C. Trimble, obispo de la Conferencia de Iowa y líder del Equipo de Trabajo sobre inmigración, dijo que el camino hace una reforma más humana del sistema de inmigración continúa. La decisión de la Corte Suprema sobre la ley de Arizona, así como la decisión del Presidente Obama de terminar con las deportaciones de ciertos jóvenes, son buenas noticias.
Según la Obispa Minerva Carcaño, Conferencia Desierto Suroeste, "el núcleo de esta legislación ha permitido la discriminación en base al perfil racial, lo cual ha generado miedo en los residentes de Arizona y debilitado la confianza en el gobierno local. Mientras celebro que la Corte Suprema haya derribado la mayor parte de la ley SB 1070, me desilusiona que se haya dejado la provisión de que la policía local pueda actuar como oficiales de inmigración".
*Gilbert es periodista multi-media de contenido para jóvenes en Comunicaciones Metodistas Unidas, Nashville, Tenn. Contacto: Kathy L. Gilbert, Nashville, Tenn., (615) 742-5470 ó [email protected].
28 de junio, 2012 | Informe UMNS
|
El fallo desmanteló la mayor parte de la ley, pero dejó intacta la provisión que permite que la policía compruebe el estatus migratorio de cualquier persona detenida, si existe "la sospecha razonable" de que la persona podría estar en el país ilegalmente en base a su fisonomía (racial profiling).
"Aunque desilusiona que la Corte Suprema de los Estados Unidos haya mantenido el llamado 'racial profiling' de la policía de Arizona en contra de sus residentes, es significativo que haya eliminado el resto de la desacertada legislación", dice Bill Mefford, de Iglesia y Sociedad. "La reforma de la inmigración debe ser realizada por el gobierno federal&ellipsis; La reforma puede y debe llevarse a cabo este año, la cual deberá ser justa y compasiva".
El fallo "estuvo correcto en algunos aspectos", dice el Rdo. John L. McCullough, pastor metodista unido y director de Church World Service, organización afiliada. La idea del perfil racial "quedó intacta, lo cual prolonga los abusos civiles y humanos en Arizona".
El Rdo. Jim Perdue, misionero que trabaja en asuntos de inmigración en la Conferencia Desierto Suroeste, dijo que mientras que varios grupos afirman que el veredicto es un paso atrás, él prefiere ser más cauto. "Los jueces argumentaron que la sección 2 de por sí no ataca los derechos individuales o la soberanía del gobierno federal, pero podría hacerlo", dijo. "Todo depende de cómo se aplique la ley".
"La opinión de la corte se esforzó por mostrar las formas en que la ley hace daño, lo que es una advertencia a la policía de Arizona y otros estados de que serán vigilados respecto a violaciones de derechos específicos", añadió.
Julius C. Trimble, obispo de la Conferencia de Iowa y líder del Equipo de Trabajo sobre inmigración, dijo que el camino hace una reforma más humana del sistema de inmigración continúa. La decisión de la Corte Suprema sobre la ley de Arizona, así como la decisión del Presidente Obama de terminar con las deportaciones de ciertos jóvenes, son buenas noticias.
Según la Obispa Minerva Carcaño, Conferencia Desierto Suroeste, "el núcleo de esta legislación ha permitido la discriminación en base al perfil racial, lo cual ha generado miedo en los residentes de Arizona y debilitado la confianza en el gobierno local. Mientras celebro que la Corte Suprema haya derribado la mayor parte de la ley SB 1070, me desilusiona que se haya dejado la provisión de que la policía local pueda actuar como oficiales de inmigración".
*Gilbert es periodista multi-media de contenido para jóvenes en Comunicaciones Metodistas Unidas, Nashville, Tenn. Contacto: Kathy L. Gilbert, Nashville, Tenn., (615) 742-5470 ó [email protected].